
La marca sueca de juguetería sexual de lujo LELO ha presentado los resultados de una encuesta realizada a trabajadores autónomos durante la primera fiesta de Navidad para Autónomos celebrada en el Teatro Magno de Madrid. El objetivo del estudio era analizar cómo la presión laboral, el estrés y la vida sexual se relacionan entre sí dentro de este colectivo. Las conclusiones son claras: la falta de desconexión y la carga mental tienen un impacto directo en las relaciones afectivas y en la vida sexual, un ámbito que los encuestados perciben como un motor relevante de bienestar y productividad.
En palabras de Adriana Di Ippolito, marketing & comunication manager de LELO, “la sexualidad no es un lujo ni un complemento; forma parte del equilibrio emocional y físico. Este estudio muestra que los autónomos son muy conscientes de su importancia para el bienestar y también para el rendimiento”. La marca, que ha patrocinado este evento pionero en España, celebra así la necesidad de contemplar el bienestar sexual como un factor esencial en la salud integral de quienes viven bajo la exigencia constante del autoempleo.
La celebración en la que se recogieron los datos nace de un punto de partida revelador: el 91 % de los españoles rinde mejor cuando es feliz, el 74 % afirma que el placer incrementa directamente su productividad y 9 de cada 10 reconoce que un orgasmo reduce considerablemente su estrés. En un país donde el 75 % usaría días libres para el autocuidado, el evento puso el foco en la importancia real del bienestar entre quienes trabajan por cuenta propia realizando una celebración en formato fiesta de empresa con guiños al sector, como un córner Modelo 69 con productos LELO y un lema divertido y poderoso: «El Placer también desgrava».
“Para mi ser autónoma me ha dado la posibilidad de ser libre y poder reparar en lo pequeño”, declaró a Yohannia de Armas poniendo el foco en la parte positiva de ser autónomo.
CONCLUSIONES DE ESTUDIO:
El trabajo como autónomo invade la vida personal: casi 7 de cada 10 lo reconocen El estudio revela que la interferencia entre la vida laboral y personal es cotidiana:
El 48,5 % afirma que su trabajo interfiere a veces en sus 20,6 % reconoce que sucede frecuentemente en los últimos años.
Solo un 10,3 % asegura que nunca le ocurre.
Este dato refleja una tendencia clara: el trabajo autónomo tiende a extenderse más allá del horario laboral y a generar fricción emocional y afectiva.
La mayoría llega a casa exhausto: la falta de desconexión es estructural
Los resultados muestran una dificultad significativa para “cortar” tras la jornada:
El 35,8 % llega a casa agotado la mayoría de los días.
El 26,9 % sostiene que prácticamente siempre arrastra carga laboral, mezclando lo profesional con lo personal.
Este patrón confirma que la falta de descanso mental es uno de los mayores desafíos del colectivo autónomo, un factor que incide en la energía disponible para la intimidad.
La carga mental afecta la vida sexual: un problema generalizado La percepción del impacto es contundente:
El 45,6 % reconoce que la carga mental afecta un poco a su vida.
El 29,4 % indica que le afecta bastante.
Es decir, casi tres cuartas partes sienten un deterioro en su vida sexual debido al ritmo laboral. Más que falta de deseo, los datos sugieren falta de espacio mental, tiempo y energía.
La gran conclusión: para el 95%, una vida sexual satisfactoria mejora la productividad
Uno de los datos más reveladores del estudio es la correlación directa percibida entre sexualidad y rendimiento:
Un 64,7 % cree que una vida sexual más satisfactoria mejoraría sin duda su productividad y bienestar general.
El 30,9 % cree que probablemente lo haría.
Esto sitúa la vida sexual dentro del marco de hábitos que impactan el rendimiento laboral, al mismo nivel que dormir bien, hacer deporte o desconectar del trabajo.
Qué mejorarían los autónomos de su vida: el estrés y el tiempo, el verdadero cuello de botella Ante la pregunta sobre qué aspecto de su vida mejorarían:
El 37,3 % escogería reducir el estrés diario.
EL 28,4 % desearía tener más tiempo libre, solo o en pareja.
Un 11,9 % pondría como prioridad mejorar su vida sexual.
Aunque la vida sexual aparece de forma explícita sólo en el 11,9 %, las dos prioridades más mencionadas, reducción del estrés y mayor tiempo libre, son condiciones esenciales para mejorar la intimidad y la conexión emocional.
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