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Dos restaurantes en Madrid para tener muy en cuenta para sentirte como en casa y comer de 10

Dani García ha abierto Tragabuches, en pleno Barrio Salamanca, una delicia para los sentidos de comida casera, con todo lo necesario para sentirte como en casa y con el

que quiere revivir sus orígenes. Corría el verano de 1998 cuando nacía Tragabuches en Ronda, que contaría con un joven Dani García de tan solo 22 años al frente de sus fogones. No se trataba de un restaurante vanguardista y multipremiado, sino el primero de kilómetro cero, con Andalucía como protagonista indiscutible de su propuesta.

Además, los fans del chef están de suerte, ya que se trata de un modelo de cocina non-stop, que ofrece tanto desayunos andaluces como almuerzos y cenas. Además, su barra, que cuenta con carta propia, propone también disfrutar entre horas con sus aperitivos más emblemáticos.

Con una capacidad para 180 personas, el espacio cuenta con tres plantas y tres zonas bien diferenciadas: la barra, el salón y cuatro reservados, disponibles en cualquier horario del local.Destacan la boutique de pescados y carnes de Andalucía a la parrilla, con una selección de la mejor pesca del día traída desde el Mediterráneo y el Atlántico andaluz, y también de las mejores piezas de chivo malagueño asado y carne en su punto óptimo de maduración.

Su suculenta propuesta se puede maridar con unos de sus especiales vinos, de los que un tercio son de Málaga. “La idea es tener 1000 referencias, ahora contamos con 500” explica el sumiller Raúl Valencia. Próximos objetivos, cuenta Garcia: Septiembre abrir Leña en Barcelona, también nueva apertura en Mallorca y en Budapest, entre otros.

Por su parte, el chef Andrés Madrigal también apuesta fuerte con su Per Sé Bistró, en pleno centro de Madrid. Con una carta neotradicional de cocina viajada no le falta detalle. Siempre está pendiente de que todo esté bien con los comensales. La actualización de su propuesta gastronómica celebra la tradición y la innovación a partes iguales, destacando el respeto por la materia prima, encontrando como ejemplo de ello la Ostra fine de Claire con Caviar de cítricos, mignonette y mantequilla ahumada, las Alitas de pollo campero deshuesado, brasas, curry rojo y mostaza, la Merluza Pil Pil con Ratatouille, las Albóndigas de Pularda, pepitoria, foie gras de pato y cous cous con coliflor y finalizando con un toque dulce, el Baba au Rhum con chantilly o la Tarta de dulce de leche y queso.

Y es que tras 12 años fuera de España, el Chef vuelve a las cocinas plasmando todos sus aprendizajes, viajes y deseos. Así, define Per Sé Bistró como la mezcla entre añoranza, trayectoria y conocimiento que, según él mismo, es donde se juntan los tres conceptos celebrando la tradición e innovación a partes iguales.

Así, presenta su nueva carta y recientes incorporaciones, además de un menú degustación que mantiene el conceptó Sin Latitud́, con el que crea una imagen de lo que fue el pasado y una explicación de lo que es el presente.

La actualización de su propuesta gastronómica nos lleva a un viaje único mezclando raíces francesas y españolas, como si de una sencilla taberna se tratase, pero, a su vez, evoluciona hacia otras influencias culinarias a través de platos reconfortantes, envueltos en un ambiente acogedor, una buena bodega y presentado en una vajilla creada por Valle García.