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De Barcelona al Penedés: Alta Cocina, burbujas y territorio

La Ciudad Condal no requiere presentación, pero sí merece redescubrirla con otros ojos, los que buscan esos ingredientes que contribuyen a que Cataluña sea Región Mundial de la Gastronomía. Allí se encuentra el epicentro de la sostenibilidad y la creatividad culinaria catalana, donde más estrellas Verdes y Michelin hay; y entre otros multipremiados, Disfrutar, el mejor restaurante del mundo de 2024 según The World’s 50 Best Restaurants, ejemplo del equilibrio perfecto entre técnica, innovación y emoción

 

A unos 40 km al sur de la Cataluña más cosmopolita está la tradición vitivinícola del Penedès. Entre viñedos y masías, la tierra, el clima mediterráneo y la pasión de sus elaboradores se traducen en burbujas llenas de identidad, en platos que saben a temporada y en bucólicos hoteles para desconectar del mundo

 

Gracias al nombramiento de Cataluña como Región Mundial de la Gastronomía 2025 por parte del Instituto Internacional de Gastronomía, Cultura, Artes y Turismo (IGCAT) vamos conociendo rincones, gentes, paisajes e ingredientes sin parangón a lo largo de sus cuatro provincias. De forma global se ha ganado el título por ser “un modelo turístico innovador y regenerativo”; y en particular, por productos tan únicos como su cava, embajador indiscutible de la cultura vitivinícola catalana; sus vinos; o la evidente calidad de su culinaria, que derrocha creatividad, talento y casi como una norma no escrita, pero sí una inquietud común, la sostenibilidad. No en vano, Cataluña es la región y, en concreto Barcelona, la provincia con más estrellas Verdes y más estrellas Michelin del país (29 restaurantes de los 36 están en la Ciudad Condal).

La Agència Catalana de Turisme (https://somgastronomia.cat/es/) nos lleva en esta ocasión a descubrir la actividad frenética de Barcelona y el sosiego del Penedès, dos extremos que se complementan y suman a un objetivo común: la excelencia y el mimo a lo local. Porque estamos en un territorio donde la gastronomía se vive como parte esencial de la identidad cultural y social, donde los productos del campo, la huerta, el mar y la montaña encuentran su expresión en recetas que van desde las más humildes hasta las más sofisticadas, y donde los valores de sostenibilidad y respeto por el entorno marcan el camino de futuro.

Del alma del cava al Corpinnat, tradición y burbujas del Penedès

El cava es embajador indiscutible de la cultura vitivinícola catalana. En el Penedès, considerado la cuna del cava, está la denominación de origen D.O Cava y las marcas colectivas como Corpinnat y Classic Penedès (espumosos que se enmarcan en la D.O Penedès). Un territorio que combina tradición centenaria e innovación enológica, ofreciendo espumosos elaborados mediante el método tradicional que se exportan a todo el mundo y que, cada vez más, se producen bajo criterios de sostenibilidad y respeto por el medio ambiente. Visitar sus viñedos y bodegas es adentrarse en un paisaje que explica la íntima relación entre la tierra, la vida y la cultura catalana.

En el corazón del Penedès, una de las iniciativas que refleja los valores de calidad, autenticidad y sostenibilidad es CORPINNAT, la marca colectiva que agrupa a bodegas comprometidas con unos estándares muy exigentes: uva 100 % ecológica, vendimia manual, vinificación íntegra en la propiedad, largas crianzas, uso de variedades históricas locales y trazabilidad total de cada botella. Actualmente ya son 19 las bodegas que forman parte de este sello, todas ellas sometidas a auditorías externas rigurosas que garantizan el cumplimiento de estos requisitos. Una de ellas es Celler Kripta, una bodega familiar emblemática ubicada en Sant Sadurní d’Anoia. Fundada en los años 50 por Agustí Torelló Mata, la casa ha sido pionera en la artesanía del espumoso de alta gama. Su etiqueta insignia, Kripta, destaca por su largo envejecimiento y su inconfundible botella con forma de ánfora.

Los suelos diversos, el clima mediterráneo con influencia montañosa y una larga historia de cultivo hacen que esta región sea ideal para la elaboración de vinos espumosos con personalidad propia. El cava del Penedès se distingue por su frescura, elegancia y capacidad de envejecimiento, y ha sido durante décadas un símbolo internacional de Cataluña. Otra de las bodegas destacadas de la zona es Mastinell Cava, situada en Vilafranca del Penedès, que ofrece una experiencia enoturística completa combinando el encanto de los viñedos mediterráneos con una arquitectura singular inspirada en las formas de las botellas de cava. En su restaurante En Rima, la propuesta está basada en ingredientes frescos, ecológicos y de temporada de km 0 dentro del movimiento slow food; y en Mastinell Hotel se descansa en el interior de esas ‘burbujeantes botellas’, en estancias que unen modernidad y confort con todos los servicios para relajarse y desconectar.

En los últimos años, la región ha intensificado su compromiso con la sostenibilidad, desarrollando proyectos de viticultura ecológica y biodinámica que no solo cuidan el entorno, sino que también realzan la autenticidad de sus espumosos. Pasear por el paisaje de viñedos, visitar las cavas subterráneas y conversar con los enólogos es adentrarse en el alma de un territorio donde la tierra y la cultura se expresan en cada copa.

Sin salir del Alt Penedès hay que visitar Casa Nova de Andrés Torres, en Sant Martí Sarroca, el primer restaurante de la zona en obtener una estrella Michelin Verde gracias a su fuerte compromiso con la sostenibilidad, y que posteriormente recibió la estrella roja de la guía francesa. Su cocina ofrece platos que rememoran sabores de infancia, reinterpretando ingredientes sencillos, incorporando creatividad, estética y una presentación cuidada. Sin duda lo que más valor tiene es que todo proveniente de cultivos propios ecológicos con el máximo aprovechamiento: desde las verduras hasta el tueste del cacao y el café, la elaboración del pan, de embutidos… todo es kilómetro 0.

Disfrutar en Barcelona

Cataluña destaca por su extraordinaria concentración de restaurantes Michelin. Actualmente cuenta con más de 60 establecimientos reconocidos con al menos una estrella, de los cuales cinco ostentan la máxima distinción de tres: Lasarte, ABaC, El Celler de Can Roca, Cocina Hermanos Torres y Disfrutar, cuyo nombre es toda una declaración de intenciones. Este quinteto forma parte del firmamento culinario internacional y son un ejemplo de innovación sin perder el vínculo con el territorio.

El restaurante Disfrutar se erige como símbolo de este éxito, puesto que en 2024 fue designado como el mejor restaurante del mundo por la lista The World’s 50 Best Restaurants y por tanto se mantiene entre los ‘Best of the Best’. Es un ejemplo de cómo Cataluña ha sabido conjugar técnica, creatividad y emoción hasta convertir la experiencia gastronómica en un auténtico viaje sensorial a través de 30 pases inolvidables de la mano de los talentosos Oriol Castro, Eduard Xatruch y Mateu Casañas. Su propuesta conjuga técnicas vanguardistas con sabores sorprendentes, cada plato es una obra de arte diseñada para sorprender y enamorar a quienes buscan la máxima expresión de la gastronomía.

Como guinda a la visita, nada como un paseo por el Barri del Born, que esconde algunos de los rincones con más historia de Barcelona: desde las Casas d’en Xifré, donde vivió Picasso, hasta la majestuosa Basílica de Santa Maria del Mar. Entre callejones llenos de tiendas artesanales y espacios con encanto, hay lugares emblemáticos como Casa Gispert, el Mercado de Santa Caterina o el Palau de la Música

Catalana, joya modernista y símbolo cultural de la ciudad.