,

EL COLORETE QUE SE ACTIVA CON LA PIEL      

Long Lasting Infinity Blush de Camaleón Cosmetics tiene una textura suave y aterciopelada, perfecta para evitar que se marquen los poros como ocurre con los coloretes en polvo.

Resiste en las mejillas todo el día.

El blush es sin duda un básico de belleza, un paso del maquillaje imprescindible que aporta un aspecto saludable, de frescura y de efecto buena cara inmediato.

Tiene la capacidad de desviar la atención del rostro a las mejillas, siendo el aliado perfecto para disimular imperfecciones y facciones prominentes. Sirve de apoyo al contouring y al corrector para resaltar los pómulos e iluminar el rostro.

Se encuetra disponible en cuatro tonos vivos. Disimula los signos de cansancio y deja sobre las mejillas un color sutil que proporciona un aspecto radiante. La fórmula tiene una textura suave y aterciopelada, perfecta para evitar que se marquen los poros, como ocurre con el colorete en polvo.

Se puede combinar con cualquiera de las técnicas de maquillaje más actuales, como el strobing, el blush drapping, o el no make up make up. Es más, las complementa ya que suaviza el look, realza y produce el favorecedor sun kissed tan deseado y favorecedor.

Para marcar los pómulos el colorete se debe aplicar en la zona central de las mejillas, rozando la piel a pequeños toquecitos hacia la parte alta del hueso del pómulo con la ayuda de una esponja de silicona y difuminar hacia arriba para evitar que queden golpes de color demasiado marcados. No hay que aplicar el colorete en la zona de las aletas de la nariz o el rictus, ya que tendrá un efecto visual de flacidez.

Además, desmaquillarlo es fácil con un bálsamo desmaquillante en aceite, leche limpiadora o jabón facial.

Apto para todo tipo de pieles, incluso las más sensibles porque es no comedogénico y no contiene parabenos ni perfumes y es vegano y cruelty free, además de estar dermatológicamente testado.