La casa industrializada y prefabricada

Premiada como una de las mejores alternativas para el alojamiento en la Bienal de Arquitectura de Nueva York, esta interesante vivienda se erige como una fantástica alternativa a las opciones más convencionales, que puede tener una amplia variedad de usos. La clave en la que se sustenta su éxito es un sistema constructivo que permite una gran flexibilidad y una rápida y eficiente ejecución.

Se trata de un proyecto desarrollado gracias a la colaboración entre el arquitecto Ignacio Rojas Hirigoyen, The Andes House y Cromolux. Con el nombre de Prototipo Sistema Constructivo Industrializado, y también Casa Casablanca, por la ciudad chilena en la que se encuentra, una comuna del litoral central de Chile perteneciente a la provincia y región de Valparaíso.

Entrada principal
Entrada Marcos Zegers

El proyecto, con una superficie de 85 m2, nace como “una búsqueda de nuevas soluciones constructivas y un intento por integrar el diseño con la arquitectura y la producción industrial”, explica en su página web The Andes House. Una idea que partió durante la pandemia del coronavirus en la que se produjo una severa escasez de materiales y una reducción de la disponibilidad económica y la escasez de mano de obra. En este contexto, se desarrolló este prototipo que tiene como base la industrialización, las racionalización y la modularidad, todo para dar respuesta “a un gran número de clientes que piden certezas que hoy parecen esquivas dadas las circunstancia”.

Dormitorio
Dormitorio Marcos Zegers

Por lo tanto, el proyecto se desarrolló como un conjunto de elementos separados: el pedestal, hecho de cerchas de acero que se pueden modelar según la topografía del sitio; la carrocería, levantada del suelo, donde chapa ondulada recubre un marco de madera integrado por fibra de madera reciclada; en la parte superior, una gran cubierta a dos aguas se eleva sobre el volumen principal, lo que permite una mayor ventilación y recogida de agua de lluvia.

A través de estas soluciones de diseño, el sistema constructivo combina principios sostenibles con una alta prefabricación de los elementos, garantizando un proceso de montaje más sencillo. El prototipo requiere un número reducido de trabajadores que pueden ensamblar todo el sistema con la ayuda de herramientas simples.

Corredor en el interior
Corredor Marcos Zegers

Otra de las ventajas que reivindican sus creadores, y que se ha resaltado en la página web de la XXI Bienal de Arquitectura de Chile, es que se trata de un sistema versátil gracias a ese uso de piezas prefabricadas que permiten diferentes configuraciones, el modelo se puede ampliar horizontal y verticalmente, acogiendo otros usos, y desmontar para reutilizarse en una nueva ubicación con independencia de las tipografías y las condiciones climáticas.

Comedor con ventanales y muebles
Comedor Cristóbal Valdés

Esta característica también se potencia gracias a la estructura metálica liviana que enmarca un conjunto de casetones de madera en muros, pisos y en cubierta. Estas unidades envuelven un panel de fibra de madera aglomerada con excelentes prestaciones termoacústicas. De esta forma, se dota al conjunto de un mayor espesor y una percepción de solidez que contrasta con los elementos esbeltos que soportan el conjunto.

Detalle de la fachada con acceso
Detalle de la fachada Marcos Zegers

“Vemos en esto la posibilidad de democratizar el diseño arquitectónico y una construcción eficiente y de calidad para quiénes hoy pudiera parecer inaccesible”, concluyen.