Nueva York cambiará la Quinta Avenida

La ciudad que nunca duerme tampoco descansa. Nueva York dará un paso más en el proceso de transformación urbanística vivido por la ciudad desde la pandemia y se ha marcado el objetivo de convertir a la Quinta Avenida en un bulevar, sin atascos ni aglomeraciones.

Primero fue la aparición de las terrazas al estilo europeo, después el cierre de calles para el disfrute de los ciudadanos y ahora descongestionar una de las calles más famosas del mundo.

El plan para reinventar el tramo que va desde Bryant Park en la calle 42 hasta Central Park en la calle 59, como un espacio público donde se priorice el transporte público y el bienestar de los peatones, ha sido impulsado por el alcalde de Nueva York, Eric Adams, y la gobernadora del estado Kathy Hochul.

El proyecto, publicado esta semana bajo el nombre “Nuevo Nueva York: hacer que Nueva York funcione para todos” va a abrir un concurso público para estudiar las mejoras de la arteria en 2023 con el objetivo que las obras estén acabadas en dos años.

Las autoridades de la ciudad han hecho públicas dos fotografías de lo que tienen en mente. El proyecto quiere ensanchar las aceras para los peatones, cambiar el clásico asfaltado gris por uno de rayas blancas y negras, plantar árboles con pequeños jardines con flores, colocar bancos para poder sentarse y dar espacio a las terrazas, ahora inexistentes en la arteria.

El bullicioso tráfico que circula sin descanso por los cinco carriles que tiene la Quinta Avenida tendría más difícil su acceso. La nueva distribución plantea destinar dos vías a los autobuses, una para los coches particulares y los taxis y la última para las bicicletas.

Además, el consistorio de la ciudad quiere impulsar así las ventas del tradicional comercio de la zona azotado por las compras online. Por más emblemática que sea, la principal vía comercial de Nueva York no ha recibido inversiones públicas en más de cien años. Su renovación se hará con financiación público-privada. El proceso para darle un aspecto de paseo marítimo en pleno Manhattan se iniciará a principios de 2023 con la contratación de la empresa que realizará el diseño definitivo.