Wole Soyinka: «Recibir un Premio Nobel en el tercer mundo supone un riesgo a tu existencia»

El escritor nigeriano Wole Soyinka, primer autor negro en recibir el Premio Nobel de Literatura, ha asegurado que recibir este galardón en el tercer mundo «es un arma de doble filo» en la mayoría de los casos, ya que conlleva también «un riesgo a la propia existencia».

«No hay un solo ser humano que no valore recibir un premio, pero en el caso del Nobel, supone una carga inmensa. Ya es bastante complicada la existencia en el tercer mundo y un premio como este te da algo de protección frente al poder, pero también suscita cierta envidia», ha explicado el autor, quien publica nueva novela, ‘Crónicas desde el país de la gente más feliz de la Tierra’ (Alfaguara), tras casi medio siglo de silencio narrativo.

Soyinka, quien ha sido muy crítico con el poder nigeriano y eso le ha supuesto años de cárcel y exilio, ha recordado cómo un dictador mandó ahorcar a un amigo suyo que se había convertido en un referente en la lucha ecológica en Nigeria, con el respaldo de autoridades como Nelson Mandela.

«El dictador decidió ahorcarlo y esa fue su manera de desafiar a la opinión internacional», ha resaltado el escritor, desvelando además que ese fue uno de los motivos que le llevaron a salir de su país. «Me fugué un año después en una moto, porque me di cuenta de que mi buena suerte se estaba desgastando y que ese dictador también quería poner en su currículum a un Premio Nobel», ha desvelado.

Soyinka se ha referido a los últimos galardonados con el Premio Nobel en literatura, celebrando por ejemplo que con Abdulrazak Gurnah –último premiado– «haya vuelto al continente africano». «Los lectores occidentales se están empezando a dar cuenta de la riqueza artística del continente, no solo en literatura», ha defendido.

No obstante, ha querido «ser muy claro» en cuanto a decisiones en base a cuotas. «No creo ni en cuotas ni en representaciones regionales ni nada por el estilo. Me parece algo muy condescendiente y sería horrible que la Academia pensara en dar un premio a alguien porque ‘ya toca’. Su obligación es la de ser aventurera y seguir sorprendiendo al mundo», ha explicado.

TRUMP, «ASESINO DE MASAS»

Soyinka decidió romper con su ‘green card’ americana debido a las políticas del anterior presidente estadounidense Donald Trump. «Ha sido uno de los jefes de Estado más peligrosos de la Historia, es un insulto al ser humano y creo que no está del todo fuera y que el peligro todavía existe», ha criticado.

«Trump estaba encargado de millones de personas y con el covid admitió que sabía de la extensión del peligro. Pero no hizo nada para enfrentarse a la amenaza y eso le convierte en responsable al menos de la mitad de muertes por esta enfermedad en el país. Es un asesino de masas y Estados Unidos tiene que despertar y darse cuenta de lo que significa el ‘trumpismo'», ha lamentado.

Para el Premio Nobel, la llegada de Biden al poder supondrá un cambio en la política del país norteamericano, pero habrá que esperar para ver los resultados. «Biden me da pena y todavía le queda por hacer, porque ha asumido el poder desde el subsuelo», ha añadido.

Soyinka vive en la actualidad en Nigeria, a donde ha regresado desde su exilio, y reconoce que echa de menos el «anonimato» de antes de lograr el Premio Nobel. «Ha sido terrible para mí y es una lucha constante en el día a día por recuperar cierto grado de anonimato y volver a ser la persona de antes», ha concluido.